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Hemos ido al cine a ver Aladdin y Hellboy
Sinceramene, no me esperaba que los post que escribí sobre el final de Juego de Tronos y sobre las cosas que sí me gustaron de este último episodio fuera a tener tanto éxito y mucho menos, que me fuese a escribir tanta gente por que os gustaría que volviese la sección de cine, música, seires y libros al blog así que hoy me aventuro a hablaros de las dos últimas películas que hemos visto en el cine: Aladdin y Hellboy.
Y empiezo por Hellboy por que creo que tengo menos que decir. Empiezo por contar que nos invitaron al reestreno y que la vimos en Inglés (esto me encanta) pero no es el tipo de películas que me gusta. El personaje protagonista me resulta un poco desagradable (estéticamente) y puede que no esté hecha para tanto golpe y violencia simplemente “por que no me fío de ti”. Si además le añadimos leyendas que implican al mismísimo Rey Arturo, resurrecciones y brujas malvadas acabando con el fin del mundo… lo dicho, que no me gustó nada. Incluso en algunos momentos tuve la sensación de que Mr.Daqui me había llevado para que viese que hay cosas perores que el último capítulo de GOT.
A mi no me gustó nada, pero insisto en que no es el tipo de cine que me gusta.
Sin embargo Aladdin…
¡Todo lo contrario! Y es que sí, soy de la generación Disney! De las que, aunque tiene clarísimo que no es una princesa, sueña con palacios, ratoncitos y pajarillos que le hagan la cama; con que su alguien mate dragones y cruce espinos y por supuesto, se la lleve de vez en cuando a dar una vuelta en alfombra mágica.
Se que no soy la única, así que supongo que hacer un remake de estas películas ya es un éxito asegurado. Si además pones como a uno de los personajes más queridos de Disney a un actor también muy querido y admirado como Will Smith el éxito está asegurado.
Personalmente, ver las historias de Disney con personajes de carne y hueso, me hace sentirlas más cerca y poder disfrutar en este caso de la ciudad de Agrabah; de Abu y Rajah; de la alfombra mágica y su peculiar forma de comunicación y por supuesto del genio, no ha sido una excepción.
En mi opinión, la adaptación es muy buena, sintiendo en algunos momentos claves, como la huída de los guardias, la presentación del genio y la entrada del príncipe Ali Ababwa que no tienen nada que envidiar a los dibujos. Incluso, aquí, el gran Will Smith se permite algunas licencias que le dan ese toque tan suyo.
Por sacarle algún pero, el vestuario de Jasmín me recordó más al vestuario que vemos en algunas películas de bollywood, pero esto ayuda a darle vistosidad a la película y grandeza al personaje, ¡que no deja de ser una princesa! Y algunos cambio en la letra de las canciones que al principio te hacen duda y pensar ¡pero si yo me la sabía entera!
Por lo demás, una película redonda, entretenida para grandes y pequeños. Por supuesto, sales cantando y con una sonrisa.
Tengo muchas ganas de ver Aladdin! Saludos!
oihh el finde q viene voy
Feliz martes